jueves, abril 26, 2007

Dos experiencias musicales

Los que me conocen saben que suelo estudiar en bares, creo que el murmullo suave que se encuentra en algunos lugares es a veces mejor que el silencio de una biblioteca (donde hasta el ruido del vecino al pasar una hoja puede llamar la atención) o el hogar donde están presentes todos los elementos distractorios habidos y por haber (televisor, computadora, heladera, teléfono, y un largo -e individualizable- etcétera). Y desde luego, estos espacios públicos también acrecentan mi cultura, ya que suelen musicalizar el ambiente (más de una vez pedí por favor que bajaran el volumen, alguna vez hasta pedí que cambiaran el dial de la radio). Hace un par de semanas estudiaba en un café que tenía un compilado con cantantes del estilo Sabina o Serrat al cual no le prestaba atención ya que estaba peleando (y perdiendo) contra un libro de cirugía cuando no logré evitar oir una frase, creo cantada por cierto músico guatemalteco cuyo nombre en ese momento no recordaba y ahora prefiero no mencionar, que me hizo caer en un estado que podría calificar como "estupor estético" y que se transformó en vergüenza ajena cuando el susodicho cantautor la repetía una y otra vez como si estuviese orgulloso de la misma. Me vi obligado a registrarla:

"Sabes que el afrodisíaco más cumplidor no son los mariscos sinó el amor."



Y anoche fui a Notorious a ver el show de Guillermo Vadalá, quien me confirmó una sospecha que yo tenía, que el bajo, en cuanto a capacidad melódica y cantidad de sonidos y matices capaz de producir, es un instrumento más rico que la guitarra.

lunes, abril 09, 2007

Flatos Voladores

Este blog no es mierda descalzo, pero esta noticia merece estar allí.

lunes, abril 02, 2007

Easter song

El año pasado subí el link de una animación para celebrar pesaj; ahora es el turno de festejar el cristianismo, así que aquí tienen:

¡Felices pascuas! (o pesaj católico)